“Es sabido que
quien tiene el poder es quien da nombres a las cosas y a las personas.”
Celia Amorós.
Filósofa y ensayista
Creo que debería ser obligatorio para cualquier
persona que acceda a una Concejalía de Mujer hacer el Curso de Sensibilización en Igualdad de Oportunidades. O, al menos,
que alguien se asegure de que tiene dos dedos de frente. De lo contrario,
podemos encontrarnos con perlas como esta que me acabo de encontrar yo.
¿Qué os parece? ¿Es esta forma se homenajear un 8 de marzo?
¿Ayuda esto a la igualdad y a la conquista de algún derecho? Horarios
incompatibles con la vida laboral de la mayoría y actividades dignas de un
panfleto de los años 50...
¿Qué
barreras de qué estereotipo intenta eliminar este programa: mujer cuidadora, víctima sufridora, dama de hierro, todoterreno profesional, femme-fatal?
¿Sabe acaso esta concejala (y quienes la rodean) cómo se debe enfocar una
actividad dirigida a terminar con el machismo, la desigualdad y la torpeza
mental de algunos?
Desde 1914, se conoce al 8 de marzo como el Día
Internacional de la Mujer Trabajadora, «excusa» que ayuda a conmemorar la larga lucha de hombres y
mujer por una sociedad caracterizada por la igualdad de ambos géneros.
Sin embargo, parece que en Algete, un pueblo del norte
de Madrid, no es exactamente así. Parece que la Concejala de Mujer,
perteneciente al PP (¿por qué no me sorprenderá?), prefiere con su programa
para este día contentar a cuatro mujeres que le bailan el agua durante todo el
año antes que ayudar a las mujeres trabajadoras del pueblo a sentir que están
cada vez un poquito más cerca de conquistar sus derechos y de mostrar a los
habitantes de la localidad el camino a seguir para alcanzar la igualdad.
Solo así me explico que se opte por concursos
gastronómicos o de parchís (actividades muy entretenidas e interesantes en
cualquier otro momento del año) en vez de alguna actividad un poco más
constructiva desde mi punto de vista: encuentros de mujeres, proyección de
cortos que aborden la temática que se conmemora este día, actividades que fomenten
una visión igualitaria entre jóvenes, una mesa redonda formada por representantes
del pueblo (ciudadanía, educación, empresas y comercio, deportes, cultura, política
, etc.), en la que se recojan ideas y propuestas que contribuyan a la igualdad
en el día a día del pueblo, una entrega de
premios que valoren a quienes en esta localidad tienden puentes entre géneros,
una marcha en contra de los recortes sociales que ha sufrido esta concejalía en
los últimos años… En fin, que ante tan pocas opciones, escogieron las menos adecuadas
para este día.
“Las mujeres ponen mayor empeño en mejorar
sus relaciones con los hombres. Pero lo más importante es cambiar las
relaciones entre mujeres.”
Kate
Millet. Feminista, escritora y activista
El colmo es que en este caso es una mujer la que
dirige esta concejalía. Una mujer joven es la que ha proyectado este programa y
lo ha defendido orgullosa. ¿De verdad le parece suficiente a una mujer en el
2014 plantear unas actividades como estas en un día como este? ¿Es esto digno
de una Concejalía de Mujer? Solo les ha faltado un concurso de cosedoras de
bajos y una competición de hacedoras de cama.
Y, lo peor, no es la primera vez, ni será la última,
pues el trabajo de este tipo de personas sin sensibilización en la materia que
deberían defender con uñas y dientes va en esta línea. Enemig@s de mujeres. ¿En
qué bando están quienes tiran piedras sobre nuestro tejado? ¿Qué utilidad
aportan estos cargos públicos que ni conocen las propias leyes y herramientas que
existen para protegernos?
“Porque hay una
historia que no está en la historia y que sólo se puede rescatar escuchando el
susurro de las mujeres...”
Rosa Montero. Periodista
De poco servirá la lucha, de nada servirán las muertes
pasadas y las lágrimas de tantas y tantas compañeras, si a la hora de la
verdad, desde una institución pública como es un Ayuntamiento, la Concejala de
Mujer nos pone a cocinar para conmemorar el 8 de marzo.
Y mientras sufrimos de los Ayuntamientos actitudes
como esta, no es de extrañar leer noticias la de la eliminación del Grado de
Igualdad en la Universidad Rey Juan Carlos: http://www.publico.es/actualidad/505508/a-la-universidad-rey-juan-carlos-le-molestaba-el-grado-de-igualdad.
No le damos importancia ninguna a la educación en igualdad. Y por eso, seguimos
teniendo desigualdad en cada rincón de cada Institución y, consecuentemente, de
cada casa española.
¡Cuánto nos queda por trabajar! Y todo se solucionaría
del mismo modo: educación, educación y educación.
Debora Alvarez Luna
Projects manager
Projects manager
Integrante de Foro Ético
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Expón aquí tus opiniones y aportaciones, serán tenidas en cuenta en la elaboración de los documentos de trabajo.